
Este es un árbol de condición semipostrado también conocido por sabina junípero, sabina marítima, pedrosa verde, enebro silvestre o sabina albar; sus hojas lucen un esplendido color verde, son muy pequeñas y aparecen casi abrazadas a las ramas; sus preciosas florecillas aparecen a principio del otoño y están formadas entre seis a ocho minipétalos color amarillo de unos 3 milímetros de diámetro, sus habitas son los lugares arenosos y entre las rocas, son muy bien ramificadas; la espesuras y peso de sus ramas les obliga a que si crecen en lugar despoblado de vegetación les cuesta mucho superarse de forma erguida pero cuando lo hace en las proximidades de otro árboles pueden llegar a superar entre diez a quince metros de altura pero en campo abierto. de escasa vegetación arbórea por ser un árbol de ramas muy pesadas entonces es cuando se muestra casi postrado pudiendo ocupar más de entre ocho y diez metros de diámetro. El enebro y la sabina son unos parientes tan cercanos que hay la creencia de que cuando el zorzal come sus frutos y deposita con sus excrementos las semillas en lugar lejano a la planta madre, si es de sabina germina un enebro y si es de enebro gemina una sabina.